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Asustame
Cuando era niña, solía tener miedo de los sustos. Me asustaba el sonido de las sirenas de ambulancia y policía, y el rugido de los aviones. Y no podía ver las películas de terror.
Ahora que soy adulta, todavía me da miedo el sonido de las sirenas de ambulancia y policía. Pero he aprendido a enfrentar mis miedos, y he visto películas de terror.
Los sustos nos hacen sentir vulnerables. Nos hacen preguntarnos qué puede pasar después. ¿Qué pasa si el monstruo nos atrapa? ¿Qué pasa si el avión se cae?.
Los sustos nos hacen sentir inseguros. Nos hacen dudar de nuestras capacidades. ¿Cómo voy a enfrentar al monstruo? ¿Cómo voy a escapar del avión?.
Los sustos nos hacen sentir incómodos. Nos hacen temer lo desconocido. ¿Qué es lo que viene después? ¿Cómo será el monstruo? ¿Cómo será el avión?.
Los sustos nos hacen sentir solos. Nos hacen sentir como si no hubiera nadie a nuestro lado. ¿Dónde está el monstruo? ¿Dónde está el avión?.
Los sustos nos hacen sentir inútiles. Nos hacen sentir como si no pudiéramos hacer nada. ¿Cómo voy a luchar contra el monstruo? ¿Cómo voy a salvar a la gente del avión?.
Los sustos nos hacen sentir impotentes. Nos hacen sentir como si no tuviéramos control sobre nuestras vidas. ¿Qué va a pasar conmigo? ¿Qué va a pasar con los demás?.
Los sustos nos hacen sentir estresados. Nos hacen sentir como si no pudiéramos descansar. ¿Qué va a pasar si el monstruo me encuentra durante el sueño? ¿Qué va a pasar si el avión se cae mientras duermo?.
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